El panorama para el tambero sigue complicado, el mercado externo continuará deprimido por unos cuantos meses, siendo la escasa producción local lo que sostiene el precio al productor. Sin duda se deberá gestionar el negocio con cautela y eficiencia mientras se navega por estas aguas borrascosas, buscando mantener bajo control los indicadores más importantes.
Pero qué número mirar…?
La actividad tambera genera un sinnúmero de indicadores para monitorear la actividad productiva. Lamentablemente son muy escasos los indicadores que correlacionan significativamente con el resultado económico, algo tan necesario para conocer “online” la salud del negocio lechero. Revisando en las bases de datos físico/económicos de los tambos de la entidad, técnicos de AACREA encontraron un indicador que sobresalía sobre todos a la hora de manifestar una relación directa con el resultado económico: los litros libres de alimentación por hectárea vaca total (VT= vaca ordeñe + vaca seca). La correlación de dicho indicador presentaba un r2= 0,6, superando a otros indicadores e inclusive demostrando que la producción individual por sí sola es un mal indicador del negocio lechero. A los productores históricamente les gusta compararse por los litros que sacan sus vacas. Lamentablemente ese número habla bien de la genética de las vacas, del diseño de la dieta y la gente que lleva adelante la alimentación (nutricionista, mixeros, etc.), pero dice muy poco sobre cómo va el negocio. Aquí lo que importa no es saber lo que se hace.., sino cómo se lo hace. Observamos muchas veces que hay tambos que logran altos rindes por vaca pero a un alto costo, quedándose finalmente con un margen de ganancia similar o menor al de aquel que fue más cauto al gastar.
Los LLA/ha VT se calculan expresando gastos de alimentación (pastoreos, silajes, concentrados) en su equivalente en litros de leche. Luego se descuenta éste valor a los litros producidos por vaca para finalmente multiplicar ése resultado por la carga promedio (Vacas totales/ha VT).
Al monitorear los LLA/ha VT estaremos involucrando en los controles simultáneamente la producción y consumo de pasto de calidad, los estados corporales al parto, la eficiencia reproductiva, los costos de alimentación, la producción individual, la disponibilidad de reservas, la eficiencia de conversión, el nivel de carga y la mano de obra involucrada en todo los procesos. Mantener la performance de los LLA/ha en un nivel adecuado garantizará en un 60% la rentabilidad del negocio de producir leche. Valores menores a 18 LLA/ha VT encenderán luces rojas y valores superiores a 28 LLA/ha VT encenderán las verdes alentando a seguir por ése camino.
Para facilitarle al productor el realizar las cuentas y asi poder analizar la evolución del negocio en el día a día, Dairylando pone a su disposición sin cargo una planilla a descargar del siguiente link ubicable (y tambien en el menú de Productos), planilla que incluye un «termómetro» con la probabilidad de crecer o caer en rentabilidad del negocio lechero:
Planilla Estimador